sábado, 21 de mayo de 2005

¿Qué será de mi?

¿Qué será de mi?
¿Qué será de mi
cuando ya no suenen
las alarmas?
Cuando el miedo
no martillee
mis entrañas
Cuando los disparos
de los bulos cobardes
dejen de silbar
en mis oídos
y las dentelladas
no amenacen
mi garganta
Cuando las palabras
dejen de ser
espada y noche
y no tenga
que justificar
hasta del aire que respiro
la última bocanada.
¿Qué será de mi?
Desgarrado y
malherido
Náufrago
de una tormenta baldía.
Sabedor de que
hay viajes sin retorno

          Temo

que cuando el mar sea calma
y el horizonte brillo
y las olas arrullo del alma
Agotado y rendido

          temo

no saber andar sereno
ni mirar el futuro
con risa fresca
y mirada limpia
no saber regresar
del corazón de la tormenta
y quedarme allí
Sabedor de que
hay viajes sin retorno

          temo

haber superado el suplicio
para tener que partir al olvido
          y entonces

¿Qué será de mi?

          ¿Qué será de mi?

                    ¿Qué será de mi?
21-5-05